CAMINATA EN LAS PIEDRAS
- tomás lucero
- 22 jul 2018
- 1 Min. de lectura
Actualizado: 18 mar 2019
ACTIVIDAD.
30 de abril de 2018.

En la playa con mis amigos decidimos caminar por las piedras al borde del mar donde se termina la playa. Y fuimos hasta donde conseguimos. Parece algo común y fácil pero no lo fue.
Yo tuve que tener mucho cuidado y concentración en mis pasos, para no pisar en alguna piedra resbaladiza y tropezarme, o para no pisar en algún filo o alguna basura que pueda cortarme o pincharme. También es muy peligroso caerse al mar, ya que, si esto ocurre las olas cortan directamente en las piedras, y esto puede provocar lesiones serias por el golpe, o provocar que te hundas por la corriente. Por eso, hay que tener cuidado con las piedras sueltas o resbalosas.
A pesar del peligro, es una actividad que desarrolló habilidades como la concentración y la paciencia, y habilidades de sobrevivencia. Aunque sea algo peligroso, pudimos ver el atardecer detrás de todo el balneario. El sol se escondió detrás de la montaña. El cielo se puso rosado y naranja, y había nubes muy finas y delicadas pintadas por el sol. Fue una maravilla.
Lo que no fue una maravilla fue volver en la oscuras, pero bueno todos sobrevivimos y no pasó nada.
Aprendí que hay que tener mucho cuidado en esas situaciones arriesgadas, ya que un simple paso en vano puede provocar una lesión o la caída al mar. Además de eso, con mis amigos nos cuidamos los unos a los otros y fuimos abriendo un camino seguro juntos. Pusimos en práctica el trabajo en equipo. Además, si a alguien le pasase algo, había otros que le iban a ayudar o iban a pedir ayuda.



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