MEDITACIÓN.

ACTIVIDAD.

julio de 2018.

Una amiga de mi mama hace clases de meditación los sábados a la mañana, y mi mama me dijo que sería muy bueno para mi, ya que me ayudaría a controlar mi estrés y ansiedad. Y entonces fui, por primera vez, el sábado 21 de julio. Fue espectacular. En la clase nos explicaron las nociones básicas de lo que era meditar y tener la mente en blanco. Es una actividad muy difícil de hacer. Me costó mucho, pero MUCHO conseguir concentrarme y no dispersarme o distraerme. Es un método que requiere de una concentración inmensa y que tarda para desarrollarse. A pesar de eso, los efectos son inmediatos: yo salí de la clase completamente diferente. Es muy difícil concentrarse en lo que la instructora dice, como en la respiración, circulación sanguínea o en partes específicas del cuerpo. Pero la verdad es que es un ejercicio muy bueno, y que me permitió concentrarme en mi propio cuerpo, y generar una paz interior distinta, que me relajó mucho. Quiero continuarlo, y espero que en época de clase me ayude a relajarme y desestresarme.

Esta actividad me mostró que la concentración y llegar a un estado de tranquilidad es algo que me cuesta mucho, y por eso quiero trabajar sobre eso para mejorar y que no sea algo tan difícil. Me di cuenta de que llegar a un estado de tranquilidad es algo muy ventajoso y que me ayudaría mucho durante mi día a día, ya que mi rutina es exhaustiva y me pone muy ansioso.